lunes, febrero 10, 2020

El fin.

Hoy después de varias sesiones terapéuticas, y como parte de mi sanación,  me animo a escribir, por que estoy recuperando mi fuerza, mi ímpetu por la vida. Son de esas veces que sientes que el miedo, la presión, y las inseguridades te inundan, te consumen una y otra vez, aun cuando te miras al espejo, y vez a tu alrededor, todo lo que construiste se cae a pedazos y tu caminas diariamente por encima sin encontrar la salida. Hoy tengo las palabras y la necesidad de expresar lo que siento, con un gran dolor en mi corazón y sin un rumbo fijo de mi persona, termino un ciclo emocional, que me llevo 5 años hermosos vivir, forjar y disfrutar con una persona maravillosa. Porque jamas de mi saldrá ninguna queja o coraje, mucho menos odio. Todo lo que se tenia que perdonar, lo deposite en dios, y en mi recuerdo mas recóndito de mi cerebro. Para quienes me conocen saben que mi corazón siempre es noble e humano , por lo que odiar es una perdida de tiempo y justificar los actos también sería mezquino. Hace semanas atrás mi union a el se acabo, ya no relación, ya no hay mas sueños ni anhelos juntos. El decidió que su vida necesitaba algo nuevo. Y respetare su decisión a cabalidad, por que ser adultos es aceptar que vendrán circunstancias que no teníamos ni previstas mucho menos imaginadas y tendremos que reconstruirnos y desaprender, vaciar, salir de la zona de confort, y volver a empezar. Quiero decirles que me encuentro bien, dando un paso a la vez, como todo duelo, es difícil, cada día cuesta esfuerzo, lagrimas y sobre todo al final del día uno sigue en continuo aprendizaje. Estoy bien y estaré en algún momento mejor, cuando la tempestad haya pasado, y mi encuentro conmigo misma este completado. Agradezco a todos por su generoso amor y comprensión al tiempo que estoy viviendo. UN ABRAZO FUERTE A TODOS...