Me siento perdida dentro de mi, al sentir esto que llevo caminando como sombra conmigo. No he logrado tener calma, paz, te recuerdo siempre. Me mortifica no tenerte, me siento a llorar, y te imagino, te vivo en mis sueños. La soledad reinó en mi corazón, la hecho ausente, sin ilusiones. Esa sonrisa de tus labios me hacia tanto volar, me sentía fuerte como un olivo. Tus ojos ni que decirlo, me hacían ver la vida de otra manera, todo tu me hacia feliz. Hoy te lloro cada día, cada instante, de verdad soy tan infeliz, me haces falta para poder respirar. Vivo intentando no vivir. Tengo todo en contra por que así lo he elegido yo. No te culpo por odiarme, así pues yo tampoco me culpo por amarte. Eres el único que me hará perder la razón hasta el momento que deje de existir. Perdóname por recordarte, escribirte y rogarte tanto por medio de las palabras que regreses a mi. Nunca perderé la esperanza de que pases por aquí y me lo hagas saber.
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