En el suelo.

Tengo muchas ganas de llorar. De llorar fuertemente, que mi cuerpo sacuda la tristeza. Me siento tan desepcionada de mi misma, por volver a creer en el amor. Pero esta vez llegué demasiado lejos, he perdido mi fuerza, mi propio respeto, mi intimidad y olvidé que mi cuerpo siente y vibra. No logré mi sueño, no pude tener un matrimonio bonito, ni siguiera si casé. Otra vez pasan los años y sigo probando ser una esposa fiel, entregada, responsable. Cumplí a cabalidad , a mi estilo y mi mas arrebatada forma de vivir. Que puedo decir soy un simple siervo que no sabe de muchas cosas, pero suelo ser respetuosa de lo que poco capte a lo largo de la vida que me tocó vivir. Estoy triste, por qué siento que ya se me agotaron todas mis fuerzas, y no fui feliz, mi vida encontró pequeños fragmentos hermosos en esta relación y también mucho dolor. Una infraguable soledad. No entiendo cómo pude fracasar, llegué con tanta fuerza a amar sin medida, me entregué y soporte todo. Pero hoy me he cansado de restar en vez de sumar. El no cree en mi, su actitud es indiferente, es de desgano, como si le estorbara. Y eso me destruye, me acaba, mata el tanto amor que aún siento por el. Es muy triste darme cuenta que a este hogar ya no siento pertenecer.

autocompasión capitulo tercero.

La soledad vuelve a invadir mi alma y complemente mi vida. vuelvo a sentirme tan sola y con una vida no victoriosa, el amor me abandona, lo pierdo a cada instante. Ya no se que hacer en este callejón sin salida, la gente me valora por lo que haga, por mi entrega y mi bondadoso cariño. Hace poco cerca de la casa donde vivo hubo un fallecimiento, un suicidio. Los motivos pudieron ser muchos, pero como entiendo a esa persona, que necesito liberar su espíritu con extrema urgencia. yo quisiera hacer lo mismo, pero no de esa forma. Antes solía desear que mi vida acabara, aun recuerdo como le pedía a una persona que ame, que me ayudará a terminar con mi dolor. Era muy egoísta, pues no me daba cuenta que aun venían muchas cosas por vivir, y no salgo del inmerso agujero, cada día coleccionando mas amargura en mi alma y soledad. Amo a mi pareja, yo se que la amo, me levanto para nuestra vida, para nuestro hogar, pero al mismo tiempo, cabo mi tristeza, el no me quiere, el no me extraña, el me ignora. Y ese dolor esta muy clavado en mi. Me cobra factura en mi salud, en mi memoria. Estoy tan mal, que nadie pudiera darse cuenta de lo mal que estoy. Mi arte es fingir que todo esta bien, que soy una persona completa, feliz. Mi único aliado la música, me acompaña, me ayuda a esconder todo lo mal que me acompleja y me come minuto a minuto. 

T de Tadeo.

Dicen que después de una gran tormenta viene la calma?... o el agua llega a otros pueblos??, que se yo. La vida es a veces tan compleja y llena de sorpresas, que aun me sorprendo que me pudieran estar pasando ciertas cosas. Como dijeran los abuelos de antes, después de vejez .. viruela. no se si sea mi imaginación, pero hay miradas en el aire que me agradan. Hoy supe su nombre, y me dio un gran gusto saber que me es un nombre muy familiar, de muchos recuerdos en el alma. Te llamas Tadeo, y me gusta tu mirada cuando me vez en la banqueta, por alguna razón no puedo mirarte a los ojos. y creo que por ese hecho no me he aprendido tu cara, tus gestos, te podría reconocer entre la gente, quizá por tu sonrisa, pero no seria ni por tu voz, ni por tu físico atlético ni por tus manos. Después de años, se siente lindo sentirte observada, entre tu y yo no habrá un capitulo, ni mucho menos una historia, pero algún día me gustaría agradecerte lo bien que me cayeron tus miradas.

Sin salida.

Empiezo a creer, que no nací para estar acompañada, el amor no se me da. Y cada vez que me siento asi, me recuerdo de pequeña soñando con el smor, con ser parte de una familia grande, tener un esposo, hijos. Desde que tengo uso de la razón y de la toma de mis decisiones, busco el amor de una pareja. Hago todo por construir ese sentimiento que te hace vibrar, detalles. Pero no funciona. Estoy apunto de anunciar mi nuevo fracaso sentimental. Esta relación no da para más, estamos rotos los dos. Me siento atrapada en una telaraña, muchas responsabilidades y al mismo tiempo un abismo de tristeza y desesperación por no saber que hacer y a donde ire. Me quedé en la calle, lo construido en tres años no lo puedo llevar conmigo, por qué no me corresponde. Ya no siento fuerzas de seguir adelante, desepcionare a mis padres, volveré a ser una preocupación. No se que pasa, lucho cada día por ser alguien útil y amoroso, pero ni realidad es que vuelvo a fracasar.

Deseos nocturnos.

Si hoy tuviera un par de alas, Volaria lejos muy lejos de aquí. Iría en busca de aire fresco para mi cabello. Desearía encontrar un poco de libertad, un ventarrón que estrujara mi cuerpo tan fuerte Que lo hiciera sentir vivo, vibrante. Está noche desearía irme y no regresar jamas.

Recordando aquello que me gustaba tanto.

Antes solía leer, me encantaban las palabras, las frases que daban sentido a mi léxico.  Siento que años atrás era muy sensible a las connotaciones escritas, podía vibrar y estremecerme con los cuentos y las autobiografías. Hoy ya ni el diario local leo, al año no acabo un libro, es más ni siquiera lo abro ni compro, pero muy dentro de mi cuando veo una mesa de libros de segunda mano, ansio comprarlos todos y hojearlos, oler ese aroma a página vieja y empolillada. Que decir de los libros nuevos en los aparadores de las librerías, es el mismo sentimiento de pararte enfrente de una barra de comidas en un restaurant buffet, ver tanto, salivar y no saber que escoger. Los extraño, extraño mis libros, mi vieja biblioteca que ya no existe.

Nosotros...

Son esos momentos en los que me detengo a llorar, saco toda mi frustración, mi cansancio y me alejo de todo. Esos momentos en los que me siento yo de nuevo, y el miedo se hace pequeño, y mi pecho grande de tanto aire que jalo y exhalo. Son esos momentos en los que recuerdo como llegue aquí y lo que he construido. Mi soledad, mi compañera, mi mejor amiga, la que me cobija y me consuela cuando siento que ya no puedo más. Nosotros, si mi soledad y yo.

sigue, sigo, seguimos..

Ya no escribo. He olvidado desahogarme, me he concentrado tanto en trabajar y perder mi tiempo, haciendo y deshaciendo cosas, limpiando y perdiéndome en mi cabeza. Paso mucho tiempo a solas, escuchando música y trabajando sin parar. Me he dado cuenta que no me he detenido en un buen de tiempo. y si de tiempo hablamos, nunca me alcanza el tiempo, siempre hay cosas que hacer para mañana, pendientes y más pendientes. Estoy guardando tanto en mi mente y en mi cuerpo, que estoy segura que no tarda en brotar alguna enfermedad que haga detenerme. Emocionalmente estoy mal, no quiero ver mi soledad, mi falta de cuidado y sobre todo de salud. me duelen los huesos, sentarme es un castigo, mi coxis esta muy maltratado y mis dientes ya se están quejando. Me he olvidado de muchas cosas, sobre todo de escribir.

Cuando uno reconoce que esta mal.

Estoy harta de llorar, de buscarlo, de pensarlo, de atenderlo. Estoy harta de sentirme culpable de cada uno de los momentos amargos de la relación. Estoy harta de ceder, de cada día hundirme más y más en la tristeza que me causa que no funcione. Estoy harta de las oportunidades, de las reconciliaciones.  Pero estoy más harta de no poder dejarlo. Estoy, estoy... harta de mí, de mi debilidad por el.

El Cambio.

Tras seguir caminando en esta historia con mas complejidades que un mundo de política, me doy cuenta que todas mis necesidades, apuntan a un solo lugar; a un nuevo rumbo. Ya no hay señales, ni indirectas, lo que quiero es un cambio,  un aterrizaje de todos las enseñanzas que día a día me deja la vida. Debo de eliminar de mi el miedo a la soledad, si ella ha sido mi entera compañera. Debo de hacer las paces con ella, y no verla como mi enemigo sino como lo que siempre ha sido; mi confidente. 

extraño día de asueto.

un frío extraño, un escalofrío que me recorre de pies a cabeza. creo que había olvidado sentir,  pero este día en particular, suelo sentir soledad, siento como me alejo en una burbuja de todo. lo veo, y no me mira, lo sigo y el no se detiene. lo abrazo y se duerme. como puedo seguir girando alrededor de el. a nadie le cuento que me siento tan sola, tan desilusionada de todo. cada vez mas callada, más encerrada en mi misma. llena de necesidades personales sin saciar. llena de amor sin distribuir. a donde ir, si atrás ha quedado mi mundo.

pasar de largo.-

hoy me sentí guapa, quizá es de las pocas veces que me siento una mujer atractiva.. vi mi cabello largo en el espejo, y quise arreglarme.. pero él fue el único que no lo noto.

El miedo que come.

Para ser exacta tengo tres días, que he llorado amargamente. Siento mi corazón destruido, siento que mi vida no tiene juicio. Estoy terriblemente sola, a quien le podría contar que me siento tan triste. Con quien compartir que no tengo fuerzas, que he tocado fondo. Me convertí en una persona perdida, mi cabeza no me da para más. Todos mis sueños de construir una familia, se han caído. Yo de verdad lo intente, vine a una nueva ciudad, con la ilusión de haber encontrado un hombre con el cual compartiría mis emociones, me pareció tan bien la idea de renovarme de construir eso que tanto he añorado desde niña, una familia. Vine como un torbellino llena de felicidad, ilusión, amor, con una fuerza enorme. Lo intente de verdad lo intente. Hoy solo me queda el recuerdo de esa fuerza que había dentro de mi. Tengo mucho miedo, tengo mucha tristeza, por que no se que hacer. Me duele mi cuerpo, me he agotado tratando de darle una oportunidad a esta relación. Una y otra vez, he caído y me he levantado, me sacudo, le sigo apostando mi tiempo, mi esfuerzo, mis sueños, el amor destruido que queda. No hay progreso, solo observo, lloro, y me autodestruyo cada vez más. Muero de miedo.

Propósitos.

No, no es tan fácil seguir las convicciones. Decidí este año reencontrarme. PRIMER PASO: conocerme de nuevo, me he visto en el espejo y no me he reconocido. Mi cara es distinta, mis ojos están perdidos, tengo arrugas, tengo el cabello largo, tengo canas, me veo menos morena, ya no tengo brillo. No soy yo. Es alguien que no me suena familiar. -¡¿Qué ha pasado conmigo?!.- no lo se, simplemente no me encontré.

amore

Con mi sonrisa podría volar por todo el mundo, llegar hasta donde quisiera. La fuerza de mis acciones son arrasadoras, he hecho todo por el amor, por sentir correr por mis venas esa adrenalina, lo he vivido. Es todo lo que he necesitado para sobrevivir. pero también ha sido lo que me ha ido extinguiendo poco a poco, ha sido mi dolor y mi soledad. Por que en mi interminable búsqueda, me alejado de todo, y de todos. El amor me ha hecho perder la razón y la dignidad.

dos mil diez y ocho.

2018, un nuevo año. Este año he decidido que será distinto a los demás, quiero salir , quiero sentir de nuevo el aire golpear mi cara, quiero sentirme viva. Este año voy a cumplir 36 años, y quiero vivir alocadamente, dentro y fuera de mi. Reencontrarme con la locura, y dejar en el cajón la cordura, la seriedad. He tratado de cumplir con todo lo civilmente y éticamente posible, con mis acciones y mis responsabilidades, y siento que no he avanzado mucho. Estoy llevando mi vida, por el camino que conozco, y eso me alarma, por que debería de transitar nuevas veredas, nuevos pasadizos. Sigo muriendo de amor y al mismo tiempo de soledad. Sigo sin casarme, sigo sin sentir esa emoción de que alguien te declare que quiere ser tu resto de vida. Sigo llorando a solas, por lo que deseo y no puedo tener tan cerca de mi. Sigo siendo la misma loca servicial que todo mundo adora, pero que siempre se cansa y no trasciende. El aveces me quiere, pero a veces me rechaza. sigo cantando la canción de árbol sin hojas de dread mar i, como mi himno. Como ven, hay muchas razones, por lo que quisiera que este año fuera diferente.